Diego y Juan salieron del armario hace mucho tiempo. De ese armario sombrío y mohoso en el que se esconden los que se ponen de perfil ante las amenazas que hacen peligrar su tierra. Ellos, como otros muchos, llevan tiempo robándole tiempo a su vidas "tranquilas" para informar, concienciar y despertar a la gente de las Merindades sobre el peligro del fracking. Hace unas semanas decidieron que, junto al cabreo, la rabia y la pelea incansable, no puede faltar la fiesta, la alegría, la compañía primaveral de los que apostamos por una tierra sin fracking. El sábado, además de contarnos todo lo previsto para la fiesta del 1º de mayo, nos dejaron huchas, pegatinas, camisetas, banderolas y carteles. Y, sobre todo, nos dejaron su ejemplo. Gracias, amigos.
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Juan y Diego: Fiesta de la Primavera, por unas Merindades sin fracking |
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