Andan los jóvenes de Valdivielso volviendo a casa por Navidad. Algunos pasan por el estudio y nos hablan de sus inquietudes, de como es la vida de universitario en la ciudad. Peio nos cuenta hoy sus primeros meses estudiando periodismo. La semana próxima escucharéis a Claudia, politóloga en ciernes. Están felices y ojalá en el futuro su talento encuentre acomodo en su tierra. Pasión fotográfica y algunos villancicos infantiles marcan la conversación con Peio. Aquí podéis ver algunas imágenes, también del valle.

Se nos ha ido nuestra amada Paz Arraiza. Cuesta creer que alguien tan llena de vida como ella ya no nos vaya a alegrar la vida. Porque si algo era capaz de hacer Paz era transmitirnos vida, pasión, alegría, ganas de vivir. La conocí a través de Lola y José María, sus padres y, tiempo después, la invité a colaborar con nuestra radio. Todos los martes empezaba la semana con ella y sentía que la vida era más bella. Buena, generosa, sencilla y sincera como nadie, Paz nos hablaba de plantas y de cualquier cosa que durante la conversación se cruzara por nuestras cabezas. Paz era como se mostraba, no había envés. La muerte se enamoró de ella pronto y en dos ocasiones Paz pedaleó más rápido que la parca y la dio esquinazo. Esta vez no ha podido ser. La primera vez que vino a la radio, junto a Bernardino Pérez Pérez acababa de estar en Los Alpes con su bici. En la última entrega de "La botica del auxilio", su sección, nos habló de que tenía previsto irse a Alemania con la bici. También nos contó que se sentía cansada. El cansancio era el aviso de que algo malo le estaba pasando. El viaje no pudo ser y los últimos meses han sido los de una lucha perdida. "Si yo compitiera, quedaría la última" me dijo el primer día que la entrevisté. Aquí siempre serás la primera. Te vamos a seguir queriendo a ti y a los tuyos. Aunque solo sea para tratar de devolverte algo de lo mucho que nos diste. Al final, mi bruja favorita, cogiste la escoba y te fuiste dejando un rastro de bruma de almohada.

Hay algo del invierno que es misterioso, completamente irremplazable. Algo desolador y profundamente hermoso al tiempo. Es como si de alguna forma necesitáramos la oscuridad de los meses de invierno para reponer nuestro espíritu interior, tanto como necesitamos la luz, la energía y la calidez del verano.

Ya lo dijo el poeta Ángel González: Es increíble: pero todo esto que hoy es tierra dormida bajo el frío, será mañana, bajo el viento, trigo. También es increíble la tenacidad de las cosas y de las gentes: todo aquello que en conjunto conforma la Tierra y el Pueblo y las dos cosas juntas la Poesía.

Duerme ahora la escuela de Toba. Es invierno. La ve uno así, algo desamparada ahora y piensa: qué maravilla defender lo soñado, pensar que despertará en primavera y no será uno el que la traicione. Eso es estar en paz con uno mismo y con sus ideales.

El programa de Sonata Fácil e Invierno propone acercarnos a una música calmada y recogida, entrando y saliendo a través del tiempo con pasos poéticos breves.

María y Yago de Sankara pasaron por la emisora para invitarnos a la celebración del solsticio de invierno que organizaron el pasado sábado. Una disculpa para vernos, dijeron. La noche más larga estuvo acompañada de fuego, música y alegría. Aprovechamos para hablar de estos meses en el valle, de la huerta y los proyectos. De como a María lo que más le gusta son los pimientos y a Yago los tomates. Del placer de comer, día tras día, durante meses, sus tomates de Valdivielso y sentir que ahí está la esencia de la vida. También quisimos conocer algo de la vida de Yago. Profesor de esgrima durante muchos años, esa profesión le llevó a Perú, donde enseñó a una de las comunidades de origen nipón de aquel país americano. Tras regresar a España como esgrimista, vía Asturias, decidió romper con la espada y dedicarse a la huerta. Tras plantar los ajos, ahora la escarola es la que manda. Al final, a María le tocó cantar un villancico. De aquella manera. Una suerte tenerlos por aquí.

Está triste Eugenio, el pastor de Robladillo. Dice que la actualidad política le tiene muy preocupado. Así empezó nuestra última conversación. El primer transistor lo compró con 16 años, era un Philips que le costó 350 pesetas y pagó a plazos, sin papeles por medio. Dice que él siempre ha estado informado. Leía hasta los periódicos sucios que se usaban como papel higiénico. La tristeza inicial se ha olvidado cuando alguna anécdota ha venido a su memoria. Un día se encontró, a finales de los 70, una revista porno. Se la regaló a otro pastor solterón que dos días después abandonó el rebaño para nunca volver. Dice que la navidad le pone triste, como la actualidad política.

El esquilón es muy importante. Se trata de esa campana más pequeña, que suena menos grave y más alegre que las grandes campanas, tan imponentes y solemnes ellas. El esquilón lo vemos en las espadañas, en lo más alto: “…y sobre campana una”. Es esa campana que en su boca puede tener medio metro de diámetro, o poco más, y hacia arriba se estrecha, con un perfil más esbelto que el de las otras. En 1636 tuvieron un serio problema en la iglesia de Santa María de Puentearenas, porque el esquilón se había quebrado y ya no podía repicar con la sonoridad debida: al hacer “din-don, din-don”, sonaba el “don” grave de las campanas grandes, pero fallaba el “din” alegre del esquilón. Y a una campana rota no se le puede poner un petacho, que se rompería de nuevo al pegarle con fuerza el badajo, por lo cual optaron por “volver a fundir” el esquilón. [Seguir leyendo]

"Casi todos nosotros recurrimos a la música para afrontar el dolor emotivo. Estas observaciones sugieren que deberíamos aprovecharla también para mitigar el dolor físico. Y efectivamente, la música es terapéutica.

Sea marcando con el pie el ritmo de una samba o escuchando con los ojos llorosos una balada, nuestra respuesta a la música es casi instintiva. La ciencia sin embargo anda como loca intentando explicar cómo y porqué actúa la música así en los humanos, no sólo en lo emocional, también en lo físico. ¿Por qué suscita emociones, inspira ideas, define identidades e incluso calma el dolor postoperatorio?

Este es un programa que inspecciona la música clásica como remedio de males y bálsamo de heridas."

De desastre medioambiental calificó Leandro lo que hace unos días se encontró en el término "Los robles de Población" entre Valdivielso y Los Altos. Aproximadamente, una hectárea de enebros, algunos centenarios, y robles fueron cortados a mata rasa. Dice que no es un cambio de cultivo sino una nueva roturación. Aquí vuelve a denunciar la descoordinación entre agricultura y medio ambiente y las consecuencias de la PAC tal y como está diseñada. Leandro se acercó hasta la emisora al día siguiente para denunciar lo sucedido.

"El vientre de la ballena" es una obra de teatro de objetos que nos enamoró en Toba el pasado año. "Pueblos en arte" es una iniciativa rural que nos llevó a Torralba de Ribota hace meses. "Soñando un lugar" es su primer documental y la pasada semana lo estrenaron en Calatayud. En Aniñón tienen una muy activa asociación de mujeres. Hasta allí se fueron Marta y Ana con la ballena a cuestas. Ana, burgalesa de Lodoso, esta terminando su tesis doctoral titulada "Tintas y películas de nanotubos de carbono para aplicaciones electrónicas". En eso estaba cuando la llamamos y de eso nos habló también. Pero, sobre todo, nos habló de esperanza para los pueblos, de esperanza para el mundo.