Llega siempre de Poniente y a medida que avanza crece y crece levantándose del suelo cada vez con más fuerza. Sube, baja, sopla a ras y de nuevo crece.
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Viento sonoro de ondas nacido en dos profundas gargantas que posee la fuerza de un dios y con ella nos envuelve y nos arrastra hacia el fondo de un inmenso remolino que de pronto abre ante nosotros y nos atrapa, y nos hace girar y girar, dejándonos caer en un brillante pozo harmonioso repleto de espuma sonara. Viento que de nuevo gime, que habla, que se disipa, que se lamenta. Remolino de luces y de sombras, de alegrías y de lamentos.
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No se asusten, es Céfiro, Dios del Viento, intentando borrar con su sonido la eterna huella de sangre de un amor no correspondido. 

Una vez más traemos una vieja foto hecho por nuestro amigo Josu. No tiene tantos años como otras pero nos trae a gente que hace mucho tiempo se fueron. Esto nos cuenta el autor de este instante capturado:
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"El viejo Ascuas, un ser peculiar. Yo tenía, y no sé porqué, una relación especial, incluso Delfina la señora del bar de Quecedo me llegó a decir una vez que era la única persona de la se había dejado pagar una ronda, un orujo le pagué y sentado en la vieja mesa de madera del bar pasamos un rato hablando. Creo que la foto es del año 1988, ya vivíamos en el Valle, estaba preparando una exposición de fotografía en B/N sobre el valle que posteriormente expuse en la sala de exposiciones de Caja Burgos con el título “Valdivielso, encrucijada de caminos”. Le vi allí sentado en la casa que hace esquina, a la izquierda de la calleja que va al ayuntamiento, me acerqué a él y le dije: ponte guapo que te voy a sacar una foto. No solo no se negó sino que dibujó la mejor de sus sonrisas, después pasamos un ratito hablando. Tal vez me tenía enchufe porque a su mujer Ana, la acercábamos, de vez en cuando, a Villarcayo los lunes para hacer compras. La llamábamos “la cabra” no por su locura, sino por cómo se subía a la furgoneta de un salto."

Carlos Martín de Nogalburgos visitó a principios de verano nuestros estudios para concretar, aún más, el proyecto cooperativo que ha puesto en marcha. Ante la petición de varios valdivielsanos recuperamos aquí la interesante conversación. En ella concreta costes y labores que la cooperativa realizaría y analiza todo lo que de cara al futuro podría traer la explotación de las nueces de calidad y su comercialización.