Ocurrió a finales de julio. Se dijo entonces que Enrique de la Peña había triunfado en Toba. Entre lo más destacado se citó la alineación como lateral izquierdo de Purcell en el once inicial de la música clásica, el agradecimiento a los valles solitarios, el grácil danzar del conferenciante o el estampado de su camisa. Al menos eso comentaba una de las asistentes mientras se alejaba de la iglesia silbando un fragmento de la ópera "Dido y Eneas" del citado Purcell. La realidad es que De la Peña nos hizo disfrutar de otra entrega en vivo de su añorada "Sonata fácil". También que si hoy, con retraso, llega aquí es porque Chus nos la reclamó hace poco y por que además un día como hoy nació Enrique y no sabíamos qué regalarle.

Durante las dos últimas semanas, Ander ha estado a los mandos de Radio Valdivielso. Como siempre, su trabajo, delante y detrás del micro, es algo que no siempre nos acordamos de destacar y agradecer. El domingo acabó entrevistando a parte de la comisión de fiestas de Condado que nos contaron todo lo que tienen previsto para esta semana en la que despediremos el verano y entraremos en el otoño. Y lo haremos bailando en Condado. Aquí nos cuentan casi todo.

Con los bolos, el juego que marcó la vida de tantas generaciones del valle, terminamos el Échale cuento de este verano. Unos cuantos niños y niñas descubrieron esa tarde lo que es el cas, la cureña, el mico o la morra. Pero sobre todo se despertó en ellos una afición que, sin duda, van a mantener. Al menos los próximos veranos en Valdivielso. Porque si algo quedó claro es que esto lo tenemos que hacer todos los años. Así lo pidieron los mayores y también la gente menuda. Tras echar unas partidas, cinco equipos de cuatro miembros cada uno, nos fuimos a merendar. Era el turno de los mayores que, en buen número, habían observado desde el graderío la evolución de la chavalada. Sin embargo, mientras comían apresurados un bocadillo y refrescaban la garganta, algunos pedían volver a jugar antes de que se metieran los grandes. En fin, que lo pasamos de maravilla. Queremos agradecer a Tartalés la cariñosa acogida y la abundante merienda con que agasajaron a los participantes. Especial ilusión nos hizo, como siempre, que Elisa se acercara hasta allí. Al final, sorteamos un bolo mágico que previamente tocaron todos los presentes. También una linografía de Moisès Díaz fue sorteada. Mikel y Elaia se la llevaron a su casa. Gracias especiales a Richi y Goyo por su asesoramiento técnico y a Loli y Eduardo por la intendencia.
Esta fue la última entrega de Échale cuento 2022. Podríamos decir que ya estamos pensando en la del año que viene pero mentiríamos. En la del 2023 empezaremos a pensar en julio o así. Gracias a tantos por todo.

Cuando hace unos meses Unai de Proyecto Villalacre me pidió el teléfono de Peio me sorprendió. No imaginaba que estos grandes músicos plantearan una colaboración con el joven aprendiz de Quintana. Habían decidido abrir su casa, sus actuaciones a otros músicos de la zona y pensaron que también él podría tener un hueco. Fue en julio cuando les vimos en Ojoguareña y Villalacre interpretando juntos cuatro canciones de Peio. Les vimos disfrutar y, al preparar las actividades de verano, pensamos que quizás fuese interesante que repitieran esa unión en Valdivielso. A todos les pareció bien. Ayer, en Condado, volvimos a gozar de esos magníficos músicos. No solo de su maestría interpretativa, también de su generosidad con quien empieza. Proyecto Villalacre protagonizaron la primera parte con Claude Bolling como principal autor. En la segunda, las canciones de Peio y alguna versión completaron la noche. Al finalizar, un vecino pedía una festival de jazz para el año que viene; una mujer, visitante zamorana, se acercaba a Peio y le confesaba que le había emocionado; Guille contaba que se había sentido muy a gusto; Carmen hablaba de los consagrados y la promesa; las hormigas voladoras quedaban aplastadas en el escenario y la abuela del cantante, siempre lapidaria, declaraba: "Lo ha hecho muy bien pero todavía le queda". Mientras haya música, seguiremos bailando.

Forges decía en todas sus viñetas aquello de "No te olvides de Haití". En medio de nuestros problemas, no es fácil recordar a quien vive en aquella tierra arrasada. El pasado viernes volvimos allí de la mano de nuestro amigo Julian Diez. Julián volvió el 7 de junio y nos envió estas fotos hace 15 días. "Aquí no hay pobreza, lo de aquí es miseria". El tamaño de Haití es solo el doble de la superficie de Burgos y allí viven 13 millones de personas sin ningún tipo de infraestructura ni gobierno. Pegaditos a la República Dominicana, una línea marca dos mundos. Julián, siendo privilegiado, no está libre de secuestro y extorsión en medio de unas calles extremadamente peligrosas en las que las pandillas, los gangs armados, controlan el país. Los de Haití es una crisis humanitaria continuada. Su trabajo allí es más social que pastoral. Trabaja, desde la misión pasionista, junto al padre Rich, lleva 32 años, en el hospital San Lucas y un orfanato que gestiona la Fundación Nuestros Pequeños Hermanos NPH
En medio de las dificultades, saber que han logrado mejorar la vida de 18.000 niños en los últimos años, es lo que motiva y mantiene el ánimo.
Si queréis echar una mano, aunque sea simbólica, pondremos una hucha en Radio Valdivielso para ayudar a toda la gente que allí necesita mejorar, aunque sea un poco, su vida.
La última vez que hablamos con Julián estaban cargando el contenedor que desde Median se enviaba a aquella isla. Aún no lo han podido recepcionar y esperan hacerlo pronto. Entre otras cosas, allí iban cinco incubadoras y cinco cunas térmicas para el Hospital San Damien.
Si queréis echar una mano, vamos a poner una hucha en Radio Valdivielso para quien quiera colaborar para mejorar, aunque sea un poco, la vida de algunos haitianos. En Haití eran las 7 de la mañana y tenían 40º con una enorme humedad. Gracias, Julián.

Desde niña, Maite Ruiz Ocaña era una apasionada lectora. Eso le llevó, hace 12 años, a plantearse que también podía escribir sus propias historias. De ahí nació "Nakerland", su primera novela, fantástica y juvenil, de la que nos habló hace unas semanas en Radio Valdivielso. En ella, algunos deseos se convierten en realidad. A Maite el primero se le ha cumplido, no es otro que escribir. De hecho ya tiene la segunda parte de lo que será una trilogía. Ahora espera dejar su trabajo y dedicarse sólo a escribir, lo que más feliz le hace.