De apariencia frágil, pero rotundo en su gesto, hace que nos detengamos un momento frente a él. Sin flor aún, sus tonalidades ya se entrevén suaves, difusas, algo etéreas y sobre todo bellas. Regado por el sol, brilla con luz propia en medio del inmenso verdor que le rodea, perfecto contrapunto para realzar su belleza.También de apariencia frágil e igualmente rotunda es la voz que hoy navegará por las ondas. Suave, delicada nos llegará repleta de colores y matices. Su aparente sencillez no hace más que reforzar su innegable belleza. Al oírla, estoy segura, pararán unos instantes para disfrutar de ella, como estoy segura que se pararían delante de este cristalino agapanto que el otro día encontré en un parque.
Texto y foto: Aurora Espiga.
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Juan presenta “Dopo l’oscuro nembo” Adelson e Salvini de Bellini Jun2017 |
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